Una aventura salir a comprar los víveres en "la nueva normalidad"

Algunas personas tienen miedo a fallar en su prevención y contagiarse por Covid-19

Elizabeth Ríos | El Sol de Toluca

  · miércoles 1 de julio de 2020

Galo Cañas | Cuartoscuro

Antes para ir al supermercado bastaba con tener dinero en la cartera. Hoy se requiere equiparse con distintas medidas de protección, además de vencer el miedo al Covid-19.

“Antes cuando planeábamos realizar las compras de la despensa únicamente hacíamos nuestra lista. Si algo se nos olvidaba regresábamos al siguiente día o a media semana", relata María Magdalena Valencia

Sin embargo, la contingencia sanitaria por Covid-19 ha ocasionado que las familias cambien la dinámica para realizar las compras en los supermercados.

El miedo a un posible contagio es latente y ahora es obligatorio portar un cubrebocas, además de utilizar constantemente gel antibacterial.

“Con esto de la pandemia tenemos que planear bien qué se va a comprar y repasar constantemente para verificar que no falte nada”, explica.

Antes de la pandemia la señora María Magdalena acudía a realizar las compras acompañada de su esposo Guillermo.

Pero ambos son considerados dentro del sector de riesgo, pues tienen más de 60 años.

Por este motivo necesitan pedir apoyo para realizar el surtido de su despensa.

“Mis hijos se encargan de hacer las compras ahora, pues a nosotros nos consideran dentro del sector de riesgo y en algunas tiendas ya no nos dejan pasar”, señala la vecina.

Sin embargo, previo a que alguno de los encargados de hacer las compras salga de su vivienda, la familia realiza un recuento de los protocolos de prevención.

“Antes de que se vayan verificamos que lleven todo lo necesario. El cubrebocas, el gel, aerosol para desinfectar lo que venga en paquete y toallitas para que limpien el carrito antes de que lo usen”, agrega la señora María.

LAS COMPRAS

Jorge Reyes, hijo de la señora María Magdalena, es uno de los encargados de surtir la despensa de sus padres para que ellos no salgan y así evitar que se expongan al contagio por el nuevo coronavirus.

Reconoce que al acudir a un supermercado tiene temor de contagiarse del virus.

“Evito acercarme a la gente y tocar cosas. Procuro desinfectar el dinero que recibo antes de guardarlo y me coloco gel antibacterial antes de tocar cualquier superficie en el súper.

“Por nada me quito mi cubrebocas hasta que regreso a la casa y tampoco me toco la cara. Dicen que por los ojos, la nariz y la boca puede entrar el virus al organismo”, expresa.

De acuerdo con Jorge, al principio de la pandemia era extraño ver a las personas con cubrebocas y hasta con caretas.

Sin embargo, actualmente es parte de la cotidianeidad al ir de compras.

“Ahora es común que te tomen la temperatura antes de entrar, te den gel o que te pidan estar separado de otras personas en el área de cajas. Pero en un principio era raro porque no estábamos acostumbrados a eso.

“No todas las personas hacen caso, al menos en eso de respetar la sana distancia, pero si alguien se me acerca demasiado yo procuro alejarme a una distancia prudente”, agrega.

Entre las previsiones que Jorge toma a la hora de acudir a un supermercado también destaca el ir muy temprano para evitar encontrarse con demasiadas personas en la tienda.

REGRESO A CASA

Luego de acudir a un supermercado, las personas encargadas de esta labor durante la contingencia sanitaria implementan medidas de higiene, como el cambiarse el calzado y ropa, además de lavarse las manos y en casos muy extremos se bañan.

“Como empezaron a informar que el coronavirus puede pegarse a la ropa o al calzado, en la casa contamos con un tapete con agua clorada para limpiarnos los zapatos antes de entrar", detalla.

Lo primero, explica Jorge, es lavarnos las manos y ya después sacar las compras y desinfectar todo lo adquirido antes de guardar los productos.

“También me cambio la ropa antes de acercarme a mi hija.

"Pero si tuve que hacer compras en dos o tres lugares diferentes y tardé mucho en regresar, mejor me meto a bañar”.

RESTRICCIONES

A la fecha todas las tiendas de autoservicio cuentan con filtros sanitarios en sus instalaciones.

En la mayoría se impide la entrada a personas de la tercera edad, niños y mujeres embarazadas, considerados dentro del sector de riesgo.

María Magdalena Valencia, ama de casa.

Nos consideran dentro del sector de riesgo y en algunas tiendas no nos dejan pasar”.