El Gobierno del Estado de México propuso subsidiar el 100 por ciento del Impuesto sobre Erogaciones por Remuneraciones al Trabajo Personal a mujeres jefas de familia que cuenten hasta con tres personas empleadas.
De acuerdo con la Ley de Ingresos del Estado de México, el subsidio sería por los 12 meses posteriores a la manifestación en la declaración que presenten.
Para ello se requerirá que sean jefas de familia y dueñas de algún negocio o contribuyentes, pero que tengan hasta tres personas empleadas.
La iniciativa plantea que en el Estado de México mientras las jefas de hogar que se desempeñan en esquemas de subordinación concentran a un 44 por ciento con ingresos menores a un salario mínimo, en el caso de las trabajadoras independientes esa concentración aumenta hasta el 67 por ciento.
Por ello, advierte la necesidad de sumar medidas que favorezcan la reducción de diferencias, brechas o desventajas dentro del mercado laboral del Estado de México, al tiempo de resaltar y reconocer la importancia de la participación de la mujer trabajadora independiente al frente de una familia por su papel determinante dentro del mismo hogar y por su participación en el mercado laboral, dando apertura a nuevos canales de comercialización para superar las barreras impuestas por la crisis sanitaria.
En el ámbito laboral, según la propuesta, en el Estado de México hay cuatro trabajadoras ocupadas por cada seis trabajadores, y la brecha resulta mayor en actividades relacionadas con la industria, la manufactura y la construcción, donde existen dos trabajadoras por cada ocho trabajadores.
La iniciativa resalta que gran parte de la fuerza de trabajo mexiquense se encuentra organizada al interior de sus hogares, bajo una estructura liderada por una pareja conyugal, donde el 93 por ciento reconoce al varón como jefe de familia y un siete por ciento a las mujeres.
Sin embargo, esa situación se revierte al considerar los hogares organizados de manera unipersonal, sin la presencia de un cónyuge, pues la mujer es la mayormente reconocida en la jefatura de familia, con un 68 por ciento, con un total de 264 mil trabajadoras mexiquenses como único soporte del hogar, con un mayor nivel de vulnerabilidad.
Además, añade que los nuevos esquemas de comercialización generados por la pandemia de COVID-19 han potenciado a las jefas de familia para que se desempeñen de manera independiente, lo cual, en la mayoría de los casos las desfavorece y vulnera en su comparativa con el sector inmerso en un esquema de subordinación.
El subsidio del 100% en el pago de impuesto sobre erogaciones por remuneraciones al trabajo personal también opera para quienes contraten a personas de 60 años o mayores, generen nuevos empleos para egresados de niveles educativos técnico, tecnológico y profesional, a empresas que muden sus fuentes de empleo a territorio mexiquense, o inicien operaciones en el mismo.
De igual forma a aquellas que contraten personal que acceda por primera vez al mercado laboral, a las que contraten a personas pertenecientes a comunidades de origen indígena, o a personas liberadas por la Ley de Amnistía del Estado de México; así como a empresas que incrementen su plantilla laboral.
También a quienes en el ejercicio fiscal 2023 contraten y ubiquen en plazas de nueva generación a quienes hayan perdido su fuente de empleo formal entre marzo y diciembre del 2020, y enero y diciembre del 2021.
A esos grupos se incorporarán las mujeres jefas de familia con hasta tres personas empleadas.
