Pedro es conocido como “El Perro”, tal vez por sus acciones que en el pasado lo llevaron a estar recluido en tres penales se ganó ese mote. Sin embargo, ahora es distinto y se dedica a apoyar a los ex convictos que quieren cambiar de vida.
En seis años, Pedro no ha sido detenido ni siquiera por una infracción de tránsito, no obstante, tras convertirse en un pequeño empresario del transporte público en la Ruta 52 que da trabajo a ex reclusos que buscan una segunda oportunidad mediante el programa “Segunda Vida”, denunció que recientemente fue calumniado mediante las redes sociales.
Para ser parte del programa de “Segunda Vida”, del cual es Coordinador, explicó que las reglas son sencillas y claras, los integrantes que suman alrededor de 90 ex reclusos bajo ninguna circunstancia deben beber alcohol, no realizar actos ilícitos y ante todo mostrar respeto a las autoridades.
Detalló que a quienes entran al programa se les da un tiempo de entre 15 y 20 días para valorarlos, sin embargo hay quienes deciden no continuar. Precisó que dentro de “Segunda Vida” hay personas que fueron acusadas por homicidio y secuestro pero que fueron absueltas ya que se les comprobó el delito.
“Hay dos que eran delincuentes, los agarraron porque eran drogadictos, estaban en donde vendían la droga cuando llegó la policía y se los llevó. A ellos los querían responsabilizar por un homicidio, pero no se los pudieron comprobar, desgraciadamente cuando salieron de la cárcel ya salieron mal, el sistema de reorganización social está muy mal planificado; entonces nosotros no vamos a cambiar al mundo, pero con lo poquito que podamos ayudar, si podemos ayudar a 100 o a 10 dándoles trabajo lo haremos”, dijo.
Respecto al hecho de que en días pasados se hizo viral en las redes sociales la fotografía del Pedro que fue tomada y publicada sin su autorización de sus redes sociales donde lo señalan de liderar una banda que presuntamente se dedican a secuestrar a través de taxistas a mujeres jóvenes y niñas para venderlas, precisó que ya acudió a la Fiscalía General de justicia del Estado de México (FGJEM) para denunciar a quien resulte responsable.
“Este delincuente es el líder y cabeza de los que se están ahora robando a las niñas y mujeres adolescentes, se acercan a las bases de taxis a exigirles a los conductores que trabajen para ellos, que lo único que deben hacer es marcarle a el mentado perro y el manda gente por ellas y ahí mismo les pagan entre 40 y 60 mil pesos, depende la edad que tengan, ellos están robando en gran parte de Ecatepec, Pero más en la zona sur, ellos se desplazan en jardines de santa clara y ciudad azteca, jardines de Morelos ,las Américas ,San Cristóbal Centro”, es el mensaje que junto a un par de fotografías de Pedro fueron compartidas cientos tal vez miles de veces en Facebook.
Ante estos hechos, Pedro, quien no niega que estuvo recluido en tres ocasiones, dos de estas en la Ciudad de México en los reclusorios Norte y Oriente y una en el Penal de Chiconautla por los delitos de robo y homicidio. Aseguró que su pasado desde hace un poco más de seis años quedó atrás y que desde entonces ha hecho hasta lo imposible por llevar una vida correcta y ser un ejemplo para sus hijos.
“Me llenó de coraje, de frustración y son muchas cosas que siento, ni cuando de verdad, porque sería mentir decir que nunca he hecho nada malo, pues obviamente, me juzgaron, me sentenciaron y pagué por lo que había hecho y por lo que no hice, salí absuelto”, expresó.
Pedro no siente orgullo, pero tampoco niega que en el pasado se equivocó y eso lo llevó a estar en tres ocasiones recluido por los delitos de robo y homicidio
“Sí me afecta porque tengo problemas con mi familia, me señalan en la calle y pues es algo que no me pasaba y no hago otra cosa más que pasarme todo el día en el trabajo, estoy en la oficina del licenciado con quien trabajo, nos vamos a reuniones, a todas su cosas que tiene que hacer yo lo acompaño para aprender. Las camioneta y taxis que ahora tengo puedo demostrar que los compre con mi trabajo”, añadió.
Pedro o el “El Perro”, como se le conoce, relató que acudió a la FGJEM en donde se puso a disposición del agente del Ministerio Público, donde además llevó su teléfono para que fueran revisados, pero le indicaron que no existía denuncia por lo tanto no existía ninguna Carpeta de Investigación iniciada.
“Afortunadamente en mi casa nunca hubo duda, pero mis hijos aún son pequeños y me preocupa lo que en la escuela les puedan llegar a comentar, eso es lo que más me ha afectado. La bronca es que la gente quiere hacer daño y lo logra, y más a una persona que le está costando mucho sacrificio, desde que estoy afuera (libre) trabajo desde las ocho de la mañana hasta las dos o tres de la madrugada del otro día. ¿Usted cree que con todos los años que estuve preso, quisiera volver a estarlo?”, concluyó.
