El Colectivo Presa Madín, conformado por ciudadanos especializados en el tema, advirtieron que en ese cuerpo de agua han detectado la presencia de metales y sustancias químicas, lo cual representa un riesgo para la población, pues el agua es utilizada para uso doméstico.
Denunciaron que se ha hecho un mal manejo de la basura y existe un desmedido desarrollo inmobiliario en el área de los municipios de Naucalpan, Atizapán y Jilotizingo, durante un recorrido con el senador de Movimiento Ciudadano Juan Zepeda.
Otro tema que les preocupa es la aprobación de la construcción de 150 mil casas que podrían llevar al colapso total de la zona.
El Colectivo refirió que desde hace tiempo ha señalado el desastre ecológico en la zona, y de no ponerse atención en la problemática, el día cero está por llegar, por el “ecocidio” que se propicia al poner en riesgo la salud e integridad de la ciudadanía.
La maestra en Toxicología, Marcela Galar, integrante del colectivo, de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del IPN y encargada de las investigaciones por contaminación del agua en la Presa Madín sostuvo que de acuerdo con diversos estudios, hay presencia de metales y fármacos, como aluminio, mercurio, hierro, Diclofenaco, Naproxeno, Acetaminofen, Antreceno, Fenantreno e hidrocarburos.
Las y los integrantes del colectivo afirmaron que la contaminación se encuentra perfectamente documentada, ha sido reconocida por las autoridades y recientemente toneladas de peces murieron en la Presa Madín, debido a la contaminación.
La gente, señalaron, está preocupada por posibles daños a la salud de los habitantes, pues el municipio de Naucalpan, en respuesta a la solicitud de información 00128/NAUCALPAN/IP/2017, admitió que el agua de la Presa Madín se considera de primer uso y se usa para dotar de agua potable a fraccionamientos residenciales y colonias.
En tanto, el asesor jurídico del colectivo, Miguel Miramontes, explicó que desde 2018 han presentado diversos recursos legales, pero han sido desechados o no han procedido por excusas y atenuantes.
En ese año, explicó, también se promovió una demanda en contra de diversas autoridades, entre ellas: de Naucalpan, Atizapán y Jilotzingo, del Gobierno del Estado de México y del Gobierno Federal, pero a la fecha no ha prosperado.
Entre las posibles causas de la contaminación de la presa, comentaron, están: el desarrollo inmobiliario desmedido, mal manejo de basura en el tiradero a cielo abierto de Naucalpan, cuya generación de lixiviados ha provocado la contaminación del agua en la Presa Madín, así como descargas de drenaje.
El colectivo señaló que el Atlas de Agua de México de 2016 y clasificado a la cuenca hídrica del área metropolitana, CONAGUA reconoce una zona en condición de absoluta escasez de agua, por lo cual sería imposible dotar de agua potable a todos los fraccionamientos inmobiliarios de la zona.
Alertaron que el crecimiento de 2018 a la fecha ha sido de un 300 por ciento y representa un grave problema.
El senador Juan Zepeda se comprometió a subir el tema al Senado de la República y a hacer un llamado a los distintos órdenes de gobierno a dar una solución real al problema, y de ser necesario, fincar responsabilidades para frenar “el ecocidio”