La obesidad infantil sigue siendo uno de los principales problemas de salud pública en México, pues de acuerdo con estadísticas de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) 2018 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el 16.2% de la población de entre 0 a 4 años tenía sobrepeso y el 17.5% de los niños entre los 5 y 11 años tenían obesidad.
Además, en la población mexicana de entre 12 a 19 años, un 14.6% tenía obesidad y el 23.8% sobrepeso, hasta el 2018.
De acuerdo con las estadísticas dadas a conocer por el INEGI a propósito del Día Mundial contra la Obesidad que se conmemora el día 12 de noviembre de cada año, lo anterior tiene que ver con el alto consumo de alimentos no recomendables, como bebidas azucaradas, dulces, postres, y comida rápida, entre otros, pues de la población infantil de 5 a 11 años de edad, sólo el 35.2% consumían frutas y el 24.9% consumían verduras.
Estos alimentos están considerados como unos buenos aliados en la alimentación saludable, pues al ser consumidos de manera cotidiana y en conjunto con una dieta balanceada, garantizan el bienestar de los menores.
Otros alimentos considerados recomendables en la dieta cotidiana de los niños, pero que no registraron gran porcentaje de consumo en la población infantil fueron las leguminosas, el huevo y las carnes.
Dicha encuesta reveló que la obesidad y sobrepeso tuvieron mayor prevalencia en niños que vivían en zonas urbanas que los que residían en regiones rurales.
Según la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) 2018, hasta ese año en el país había 38.5 millones de niñas, niños y adolescentes de 0 a 17 años, los cuales representaban el 30.8% del total de población mexicana.