Entre el 29 de abril y el 6 de junio autoridades estatales, municipales y las y los legisladores locales deberán abstenerse de establecer y operar programas de apoyo social comunitario que impliquen la entrega a la población de materiales, alimentos o de apoyos asistenciales, o de promoción y desarrollo social.
Las únicas excepciones serán para los casos de extrema urgencia por enfermedades, desastres naturales y otros eventos de igual naturaleza.
El Congreso local no dio a conocer la lista de programas que se suspenden durante la veda electoral, pero establecieron que las autoridades estatales seguirán desarrollando las funciones y servicios públicos necesarios para la atención y desarrollo de la población.
Los servicios deben mantenerse
La Legislatura precisó que las autoridades municipales por ningún motivo deberán suspender las funciones y servicios públicos y las y los beneficiarios de los programas de contenido social, que no los reciban durante la veda electoral podrá solicitar su reintegración posterior a las elecciones.
En cada proceso electoral el Congreso mexiquense determina la suspensión de programas sociales previo a la jornada electoral, pues durante las campañas electorales está prohibido establecer y operar programas de apoyo social o comunitario.
El artículo 261 del Código Electoral del Estado de México señala que durante los 38 días anteriores al de la jornada electoral, las autoridades municipales, estatales y las y los legisladores locales se abstendrán de establecer y operar los programas de apoyo social o comunitario que impliquen la entrega de materiales, alimentos, programas asistenciales o de promoción y desarrollo social, salvo en los casos de extrema urgencia.
Las y los legisladores también puntualizaron que algunos programas no deberán suspenderse para no afectar a la población.
Las y los diputados hicieron énfasis en la situación de emergencia sanitaria y en la necesidad de mantener las medidas destinadas a la máxima protección de la salud y educación de las y los mexiquenses y garantizar el acceso indispensable a las condiciones mínimas de bienestar.
En 2018
Hace tres años el Ejecutivo propuso mantener 59 programas, pero finalmente la Legislatura decidió dejar 47 que eran operados por 15 dependencias y organismos, entre ellas, las secretarías de Educación, Desarrollo Social, Desarrollo Agropecuario y Medio Ambiente, además del DIFEM.
Entre los apoyos que se mantuvieron estaban: becas, microcréditos, apoyos a adultos mayores, a personas con discapacidad, al campo, desayunos escolares, pagos por servicios ambientales, ferias de empleo, mejoramiento de vivienda, entre otras.
Quedaron fuera programas como el salario rosa, pero en ese momento, la oposición, que era minoría, integrada por el PAN, PRD y Morena votaron en contra, pues advirtieron riesgos de un manejo con fines proselitistas y la preocupación de que algunos pudieran ser utilizados con sesgo, o para la compra de votos.
