En el lenguaje taurino es común este aforismo, “el toro no tiene palabra de honor”. Por su instinto,el ganadero, el juez, el matador, ignoran cómo será su embestida. Si es bravo, noble, y si lo entiende el torero, habrá faena. En caso contrario, si es manso , descastado, y sin transmisión es imposible apreciar el arte, el poder, el valor, del matador.
Si eso se da en una aciaga tarde, la afición molesta comenta: “Corrida de expectación, corrida de decepción”.
Este resultado no es privativo de la México. Se da en todos los del mundo. No siempre las corridas conmueven y convencen a públicos exigentes.
En siete corridas, de 12 contempladas en el Derecho de Apartado, se cortaron nueve orejas. No levantaba la temporada. Diciembre, mes de festejos y vacaciones rompió la cuestionada racha taurina. La corrida Guadalupana dio mucho que desear. El juez después de ordenar colocar banderillas negras a un manso, indebidamente lo devolvió a los corrales.
En este último mes se da oportunidad a toreros ignorados, carentes de oportunidades. Los incluyen como relleno. O bien, arman corridas con toreras marginadas por las empresas. Hilda Tenorio, Lupita López, Mary Paz Vega, y otras no las contratan. Los movimientos feministas no hablan por ellas. Merecen torear en la Plaza México. Si se niegan los hombres a alternar con ellas, será por temor que alguna los bañe en la plaza más grande del mundo.
El re debut de José Mauricio y Fermín Rivera, el 15 de diciembre, revitalizó la fiesta. Cada uno, tiene una propia manera de interpretar el toreo. De arte, es el de José Mauricio; de poder, el de Fermín. Los vacacionistas se perdieron el resurgimiento del capitalino que cortó 2 orejas; el potosino una. Los toros de Barralba, con encaste español, .
Lo que no se había visto en mucho tiempo, la empresa repitió la tarde del día 22 a los triunfadores. José Mauricio desorejó a “Viajero” y a “Primazo”, de Montecristo. Fermín no tuvo trofeos. En pasado 12, Uriel Moreno “El Zapata”, corto tres. Jerónimo una , a toros de Pozo Hondo. En solo tres corridas, se cortaron nueve apéndices.
En estas, volvió el encanto. La temporada 2019-2020 elevó su categoría. Además se dieron dos indultos. “Gaspar”, de Vista Hermosa, lidiado por el caballista Emilio Gamero el 29 de diciembre y “Siglo y Medio” de Piedras Negras, que toreó Gerardo Rivera, el 5 de enero.
El indulto a este, fue muy cuestionado. Qué por su bravura él solo se indultó. No por el torero tlaxcalteca. Antonio Mendoza, chaval como aquel, peleó las palmas a las figuras el pasado domingo.
Estamos en el umbral de celebrar 500 años de haberse efectuado la suerte de cañas, el 13 de agosto de 1526, en honor de Cortés a su regreso de las Hibueras. Contra lo que digan o hagan los plañideros antitaurinos, porque es inmortal, la Tauromaquia o Arte de Torear, como llama Pepe-Hilo, a la fiesta de toros, tiene que seguir.
CRONISTA / selata@hotmail.com