/ miércoles 26 de septiembre de 2018

Política y Negocios


ProMéxico sí debe seguir

Terrible y agónica declaración del presidente electo. Eso de desaparecer a la única institución que en realidad se dedica a promover la inversión extranjera directa (IED) hacia nuestro país y a posicionar productos mexicanos en el exterior, se me hace una aberración.

¿Las supuestas bases? “que no hace nada” y que lo que hace este organismo pasará a ser funciones de las embajadas. Vayamos por partes, antes de ProMéxico nuestro país hacía esfuerzos dispersos, los gobiernos estatales trabajaban por su cuenta y la inversión extranjera directa llegaba, pero sin estrategia. Lo anterior era una razón de peso para que en la época de Felipe Calderón se decidiera crear un fideicomiso que dependiera directamente de la Secretaría de Economía. Sus principales objetivos planteados fueron: I) buscar nuevos mercados, II) incrementar la competitividad de las exportaciones mexicanas, III) atraer más y nueva IED, y IV) consolidar todas las estrategias del gobierno federal en una sola entidad para de allí orientar los esfuerzos hacia el exterior.

El plan de austeridad de la próxima administración federal tiene un espíritu interesante, pero debe justificar con transparencia sus argumentos para decidir si una institución desaparece o no. La justificación actual es que porque tiene un gran presupuesto y los salarios de los directivos son muy altos e inclusive por encima del sueldo del que será el próximo presidente. Si ese es el tema, que baje los salarios. Para entender el presupuesto que ProMéxico tiene, se puede consultar en la siguiente liga: http://www.promexico.mx/es/mx/recursos-financieros. De este presupuesto no sólo es nómina, sino también hay gastos por asesoría, participación en ferias comerciales internacionales, gastos fijos y variables por toda la operación de mantener vivo este organismo que a tantos empresarios y gobiernos estatales ha ayudado.

Pero finalmente lo importante es ver el impacto comercial y de inversión que ha tenido a lo largo de estos años a través de sus 46 oficinas en diferentes países del mundo y 30 oficinas en los estados de la República Mexicana. Según datos de su cuenta de twitter, ProMéxico ha generado 300,000 empleos directos por la IED y cuatro de cada 10 dólares de IED del 2013 al 2018 se derivaron por los esfuerzos realizados por dicha institución.

Y seamos claros, las embajadas llevan temas de la agenda política y las oficinas de ProMéxico llevan toda la parte de negocios internacionales. Por lo anterior, ProMéxico sí debe seguir existiendo ya que se complementan los esfuerzos.

Coordinadora

Licenciatura en Administración de Negocios Internacionales

Departamento de Estudios Empresariales

Universidad Iberoamericana

Experta en asuntos internacionales

aribel.contreras@ibero.mx

@Aribel007


ProMéxico sí debe seguir

Terrible y agónica declaración del presidente electo. Eso de desaparecer a la única institución que en realidad se dedica a promover la inversión extranjera directa (IED) hacia nuestro país y a posicionar productos mexicanos en el exterior, se me hace una aberración.

¿Las supuestas bases? “que no hace nada” y que lo que hace este organismo pasará a ser funciones de las embajadas. Vayamos por partes, antes de ProMéxico nuestro país hacía esfuerzos dispersos, los gobiernos estatales trabajaban por su cuenta y la inversión extranjera directa llegaba, pero sin estrategia. Lo anterior era una razón de peso para que en la época de Felipe Calderón se decidiera crear un fideicomiso que dependiera directamente de la Secretaría de Economía. Sus principales objetivos planteados fueron: I) buscar nuevos mercados, II) incrementar la competitividad de las exportaciones mexicanas, III) atraer más y nueva IED, y IV) consolidar todas las estrategias del gobierno federal en una sola entidad para de allí orientar los esfuerzos hacia el exterior.

El plan de austeridad de la próxima administración federal tiene un espíritu interesante, pero debe justificar con transparencia sus argumentos para decidir si una institución desaparece o no. La justificación actual es que porque tiene un gran presupuesto y los salarios de los directivos son muy altos e inclusive por encima del sueldo del que será el próximo presidente. Si ese es el tema, que baje los salarios. Para entender el presupuesto que ProMéxico tiene, se puede consultar en la siguiente liga: http://www.promexico.mx/es/mx/recursos-financieros. De este presupuesto no sólo es nómina, sino también hay gastos por asesoría, participación en ferias comerciales internacionales, gastos fijos y variables por toda la operación de mantener vivo este organismo que a tantos empresarios y gobiernos estatales ha ayudado.

Pero finalmente lo importante es ver el impacto comercial y de inversión que ha tenido a lo largo de estos años a través de sus 46 oficinas en diferentes países del mundo y 30 oficinas en los estados de la República Mexicana. Según datos de su cuenta de twitter, ProMéxico ha generado 300,000 empleos directos por la IED y cuatro de cada 10 dólares de IED del 2013 al 2018 se derivaron por los esfuerzos realizados por dicha institución.

Y seamos claros, las embajadas llevan temas de la agenda política y las oficinas de ProMéxico llevan toda la parte de negocios internacionales. Por lo anterior, ProMéxico sí debe seguir existiendo ya que se complementan los esfuerzos.

Coordinadora

Licenciatura en Administración de Negocios Internacionales

Departamento de Estudios Empresariales

Universidad Iberoamericana

Experta en asuntos internacionales

aribel.contreras@ibero.mx

@Aribel007