/ miércoles 16 de enero de 2019

Política y Negocios


El shutdown de México

El término shutdown se otorga al cierre parcial de las operaciones del gobierno de Estados Unidos (EU). Recordemos que actualmente dicho país ya va para un mes que, ante la nula conciliación entre los Demócratas y los Republicanos (por no decir que es el Ejecutivo) respecto al presupuesto federal, se han visto afectados aproximadamente 800 mil empleados que fungen como servidores públicos. Es decir, el gobierno se paraliza y la sociedad es la afectada ya sea como usuarios de servicios públicos o bien, como empleados que no reciben su sueldo.

En el caso de México, hace 11 días despertamos con la sorpresa de que, siendo país productor y exportador de petróleo e importador de gasolina, comenzaba una gran escasez de este combustible a consecuencia del combate al robo del mismo, mejor conocido como “huachicoleo”.

Sin embargo, los responsables de cerrar los ductos y quien dio la orden, no consideró un plan de acción para cubrir la contingencia de abasto ni tampoco evaluó el impacto de los daños en caso de no restablecer rápidamente el suministro. Esto me recordó a un suceso imposible de predecir y que no fue intencional, hace un par de años cuando vivimos los casos de influenza, que generó una crisis de salud con su impacto económico correspondiente.

Al día de hoy, se estima que la afectación económica ha sido de casi mil millones de pesos. La Coparmex (Confederación Patronal de la República Mexicana) en León, Guanajuato, anunció que el 30% de los trabajadores ha dejado de asistir a sus empleos y, por lo tanto, estos pierden 36 millones de pesos en cuanto a sus salarios. Recordemos que este estado ha sido el más afectado por lo que su gobernador ha viajado a EU para importarlo directamente. En otras entidades federativas el impacto ha sido similar, eso sin considerar las empresas de otros países que se han visto afectadas desde su lugar de origen al no tener asegurado que sus mercancías podrán llegar al destino final por falta de combustible.

El Banco de México estima afectación en la inflación dependiendo de la duración de esta crisis, esto sin considerar que los productos de la canasta básica se han visto afectados en muchos lugares por no poder llegar debido a que el transporte de mercancías requiere de combustible para poder moverse de un lugar a otro.

Ni PEMEX ni el gobierno federal han dado a conocer un plan de emergencia o bien, un comunicado que diga hasta cuándo mientras los rumores en las redes sociales crecen a raíz de un artículo publicado en un medio estadounidense donde argumenta que México dejó de importar gasolina. El gobierno sólo lo niega, pero no da pruebas de que sí se sigue comprando.

Lo único que nos queda es seguir formándonos por horas y esperar a que el combustible llegue a cada rincón de nuestro país incluyendo obviamente a Toluca.


Coordinadora

Licenciatura en Administración de Negocios Internacionales

Universidad Iberoamericana

aribel.contreras@ibero.mx

@Aribel007


El shutdown de México

El término shutdown se otorga al cierre parcial de las operaciones del gobierno de Estados Unidos (EU). Recordemos que actualmente dicho país ya va para un mes que, ante la nula conciliación entre los Demócratas y los Republicanos (por no decir que es el Ejecutivo) respecto al presupuesto federal, se han visto afectados aproximadamente 800 mil empleados que fungen como servidores públicos. Es decir, el gobierno se paraliza y la sociedad es la afectada ya sea como usuarios de servicios públicos o bien, como empleados que no reciben su sueldo.

En el caso de México, hace 11 días despertamos con la sorpresa de que, siendo país productor y exportador de petróleo e importador de gasolina, comenzaba una gran escasez de este combustible a consecuencia del combate al robo del mismo, mejor conocido como “huachicoleo”.

Sin embargo, los responsables de cerrar los ductos y quien dio la orden, no consideró un plan de acción para cubrir la contingencia de abasto ni tampoco evaluó el impacto de los daños en caso de no restablecer rápidamente el suministro. Esto me recordó a un suceso imposible de predecir y que no fue intencional, hace un par de años cuando vivimos los casos de influenza, que generó una crisis de salud con su impacto económico correspondiente.

Al día de hoy, se estima que la afectación económica ha sido de casi mil millones de pesos. La Coparmex (Confederación Patronal de la República Mexicana) en León, Guanajuato, anunció que el 30% de los trabajadores ha dejado de asistir a sus empleos y, por lo tanto, estos pierden 36 millones de pesos en cuanto a sus salarios. Recordemos que este estado ha sido el más afectado por lo que su gobernador ha viajado a EU para importarlo directamente. En otras entidades federativas el impacto ha sido similar, eso sin considerar las empresas de otros países que se han visto afectadas desde su lugar de origen al no tener asegurado que sus mercancías podrán llegar al destino final por falta de combustible.

El Banco de México estima afectación en la inflación dependiendo de la duración de esta crisis, esto sin considerar que los productos de la canasta básica se han visto afectados en muchos lugares por no poder llegar debido a que el transporte de mercancías requiere de combustible para poder moverse de un lugar a otro.

Ni PEMEX ni el gobierno federal han dado a conocer un plan de emergencia o bien, un comunicado que diga hasta cuándo mientras los rumores en las redes sociales crecen a raíz de un artículo publicado en un medio estadounidense donde argumenta que México dejó de importar gasolina. El gobierno sólo lo niega, pero no da pruebas de que sí se sigue comprando.

Lo único que nos queda es seguir formándonos por horas y esperar a que el combustible llegue a cada rincón de nuestro país incluyendo obviamente a Toluca.


Coordinadora

Licenciatura en Administración de Negocios Internacionales

Universidad Iberoamericana

aribel.contreras@ibero.mx

@Aribel007