Dicen, “qué el mal triunfa, porqué los malos son más” o bien, porque los buenos -menos malos- no hacen nada. Calificar en una sociedad a buenos y malos es complicado. Hay diferentes formas de pensar y clasificar como malos a quienes no coinciden con uno es poco sabio e injusto.
Sin embargo, cuando se hace daño a una persona o grupo, eso es malo, cuando no se respetan los derechos de los demás, es malo. Cuando conscientemente se roba, miente, golpea, engaña, despoja, destruye y corrompe a otros individuos para hacer maldades, justificándolas como buenas, eso es malo.
Siempre me sorprende la actitud de los poderosos, prepotentes, nos hablan solo si tienen intereses y nos ignoran cuando creen que no les servimos, para sus objetivos.
Cuantos buenos liderazgos se han perdido por ignorarlos y no pocas veces se pierde por el exceso de soberbia.
Dicen que el poder corrompe, yo no lo creo. Lo que sí sé, es que el poder hace que las personas se muestren, como realmente son. El ladrón, el abusivo, el prepotente, el corrupto que parecían personas incorruptibles, mientras no tenían poder, al tenerlo la vergüenza se les quita y su verdadero instinto se manifiesta.
Ejemplos hay muchos y hoy, no tienen empacho en presumir su verdadera esencia. La maldad prolifera, enfermándolo todo, contaminando a la sociedad que pierde día a día espacios para convivencia pacífica y respetuosa. Las calles son cerradas para fiestas de potentados o simplemente para que no los perturben 28 de octubre es una de esas calles que casi todas las noches es cerrada sin importar que es principal para el transito de autobuses y carros que se dirigen a Tollocan, viniendo por Morelos, frente a la Fiscalía del Estado, que también se apropio del espacio y de la calle que cruzaba de Hidalgo a Morelos, Fiscalía que esta rodeada de postes que impiden el paso de los ciudadanos a la calle y los edificios. Lo mismo ocurre en el primer cuadro de Toluca, donde se cierran las calles principales, Independencia, Gómez Farias y hasta Lerdo, para los ejercicios y fotos de los gobiernos que se turnan para obligar a los tolucenses a dar vueltas por la capital, buscando la manera de llegar a su destino.
La ciudad de México, no se libra de la pérdida de espacios públicos y vías de acceso. Varias veces me he encontrado dando vuelta al centro, mientras Isabel La católica esta cerrada, porque el Presidente esta en Palacio y necesita esa calle y algunas alrededor del Zócalo de la Ciudad de México.
Varios espacios públicos y sus edificios, se han convertido en oficinas del gobierno que cierran el acceso para comodidad y seguridad de un reducido número de personas.
Quizá la descentralización administrativa y su simplificación, podrían, facilitar los accesos, reducir los embotellamientos y agilizar los trámites. Crear un espacio administrativo en zona apropiada, seguro ayudaría mucho y acotaría los problemas en más de 70 por ciento.
Transparentar, tener mentalidad de servicio y no de poderoso, amar al prójimo con acciones, reduciría las tensiones de la sociedad en que vivimos ayudándonos a vivir en paz, con cierta abundancia y ayudándonos todos a tener un mejor lugar donde vivir.
Licenciado en Comunicación por la UAEM
Maestrando en Periodismo Político por la Carlos Septién García
