Toluca, México.- En México son pocos los casos de narcolepsia, el cual es un trastorno del sueño el cual se hace presente con la hipersomnolencia o deseo intenso de dormir, no obstante, las investigaciones en torno a ese padecimiento cada vez son más frecuentes, señaló el director de investigación del Instituto de Fisiología de la BUAP, José Ramón Eguíbar Cuenca.
Al dictar conferencia “La narcolepsia un trastorno del sueño: rol de las orexinas”, en la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), recomendó a los estudiantes y población en general acudir con un médico o una clínica del sueño ante cualquier irregularidad detectada en ese proceso.
Eguíbar Cuenca, comentó la incidencia del trastorno no es alta en el ámbito mundial, al registrarse en uno de cada 200 mil personas.
El especialista durante su participación en el Primer Simposio Interinstitucional de Fisiológica explicó que la narcolepsia es el deseo intenso de dormir, cuyo término médico es hipersomnolencia.
Asimismo, indicó que regularmente puede estar acompañado de cataplejía, es decir la pérdida del tono muscular, la cual nos permite mantenernos erguidos.
En otros términos, el investigador de la Benemérita Universidad de Puebla (BUAP), resumió a la narcolepsia como el quedarse dormido sin motivo o antecedentes durante el día, esto es a pesar de haber dormido bien durante la noche anterior.
Todas las mañanas tenemos que vencer la gravedad que está ahí, aunque no la vemos, y entonces eso lo hace nuestro organismo contrayendo los músculos haciendo se pongan duros para vencer a la gravedad.
Otras de las características del trastorno una vez descrito, es que los pacientes suelen caer al caminar o reírse.
Origen
El padecimiento, expresó, se ocasiona por la pérdida de las orexinas, que es una proteína o péptidos, los cuales se encuentran alojadas en el cerebro que permiten mantenernos alerta, en conciencia o atender una actividad es el caso de asistir a clases, resolver un exámen, escuchar una conferencia y fijarnos en nuestro entorno.
Las orexinas son quienes coordinan esta fase de atención, hace que nos fijemos lo que está alrededor de nosotros y adquirir esa información, es lo que llamamos consciencia y el péptido nos permite estar en vigía, atentos y conscientes.
Por lo tanto, ante la ausencia de las orexinas el cerebro produce ese deseo alto de dormir, mencionó el también investigador titular de la BUAP.
En ese sentido, exhortó a la población en general a evaluar su sueño con un especialista o clínica del sueño a fin de una detección oportuna de cualquier trastorno.
En esos sitios se analiza o se estudia el sueño para determinar un diagnóstico por medio de electrodos para medir la actividad cerebral, la de los músculos y el corazón, los resultados los atenderá un psicólogo, un psiquiatra y un médico internista.
Son incipientes en México este tipo de clínicas pero es importante lo que hace la Asociación Mexicana para la Medicina del Sueño y las propias organizaciones promueven el conocimiento tras evaluar el sueño.
En el Instituto que dirige la línea de investigación se realiza con animales, pero avanza a nivel general.