Sabores, colores y artesanías fueron los elementos principales que se destacaron en la inauguración de la primera edición del Festival del Hongo y el Licor, Khó (traducción de hongo en otomí).
Dicho festival tiene por objetivo visibilizar la cultura otomí a través de dar identidad cultural al pueblo de Amanalco.
Los hongos silvestres de los bosques del municipio fueron los protagonistas de esta primera edición, a pesar de que la temporada de hongos ya va de salida por la abundancia de agua pluvial que se registra en los bosques.
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Aún así, gachupines, patitas de pájaro, orejas y una gran variedad de hongos se exhibieron, guisaron y comercializaron en el corredor gastronómico-artesanal del festival.
Asimismo, se destacó la elaboración de licores de frutas artesanales, hecho en hogares de Amanalco.
La zarza, el membrillo, la ciruela, guayaba, mora, durazno y hasta el té de monte, fueron mezclados con azúcar y aguardiente, para que se convirtieran en una bebida añejada de frutos naturales.
En dicho corredor también se exhibieron bordados y tejidos otomíes de la comunidad de San Sebastián, artesanías de madera de la comunidad de San Mateo, productos orgánicos a base de aguacate y hierbas medicinales.
Así como bordados mazahuas de la comunidad de San Antonio de la Laguna, del municipio vecino de Donato Guerra.
A la par, actividades culturales y artísticas engalanaron esta primera edición, como los talleres de acuarela, encuadernación y bordado otomí los cuáles se ofrecieron de manera gratuita.
Y la presentación de grupos musicales del género de rock, con lo que se buscan abrir brechas para desarrollar otro tipo de actividades artísticas que permeen en las y los amanalquenses.
