/ miércoles 2 de noviembre de 2022

Reptiles y otras especies son parte de la biodiversidad del Parque Ambiental Bicentenario

Las autoridades precisaron que existe una delimitación de zonas y las áreas públicas son poco visitadas por estos animales

En el Parque Ambiental Bicentenario de Metepec, que es un Área Natural Protegida (ANP), coexisten varias especies, desde aves hasta réptiles, en donde encuentran refugio, señala la Secretaría de Medio Ambiente del Estado de México..

No obstante, dicho espacio se encuentra delimitado en cada una de sus zonas como las boscosas, de cultivo y las recreativas, las últimas están abiertas al público en general.

Recordar que en días pasados una persona en redes sociales publicó la presencia de una víbora de cascabel al interior de dicho parque, de la cual tomó evidencia.

En ese sentido, la dependencia solicita a usuarios que acuden a dicho lugar a dar aviso en caso de nuevos avistamientos al personal de la Coordinación General de Conservación Ecológica que se encuentra al interior del parque.

El Parque Ambiental Bicentenario se ha convertido en un lugar importante para la recreación y el deporte, pero también con un alto potencial para la conservación de la flora y fauna presente en la zona, la cual, a través del tiempo, se ha transformado de espacio rural a una zona urbana, se explicó.

En el caso de la fauna del Parque, indica, existe presencia de un representativo grupo de aves y de otras especies.

Al interior de esta Área Natural Protegida existe una importante superficie con plantaciones de pinos principalmente, formando bosques artificiales, además de varios campos de cultivo (en la zona no abierta al público) y que son colindantes a las áreas recreativas, lo que permite tener presencia de otras especies silvestres, ya que además de las aves, coexisten reptiles, anfibios y mamíferos”.

Hace unos días, mencionó, un usuario avistó la presencia de una víbora de cascabel al interior del Parque en un espacio colindante a la zona boscosa.

Como ya se ha mencionado, esta especie de reptil coexiste y es parte de la biodiversidad presente al interior del ANP y se encuentra al interior, principalmente de las zonas boscosas y en los terrenos de cultivo, en donde encuentra refugio”.

En ese orden, dicha Secretaría, a fin de salvaguardar la integridad y la seguridad de los visitantes a los espacios recreativos y deportivos, los mantienen libres de vegetación, a través de podas frecuentes, lo cual evita la presencia de estos reptiles, destacó.

En ese sentido, solicita a los usuarios de ese espacio público que, en caso de detectar nuevos avistamientos, informen al personal de la Coordinación General de Conservación Ecológica de la Secretaría del Medio Ambiente, quienes tienen oficina al interior del Parque Ambiental Bicentenario.

De igual manera, sugirió que lo pueden hacer al número telefónico 722 179 4165, para tomar las acciones correspondientes.

La dependencia comenta que una de las mejores estrategias para salvaguardar los recursos naturales es la creación de las Áreas Naturales Protegidas (ANP), las cuales promueven la conservación de los recursos naturales y la biodiversidad.

Esos sitios también atienden el desarrollo del sector social y turístico, tal es el caso del Parque Ambiental Bicentenario.

Historia

Dicho parque fue inaugurado el 5 de junio de 2009, ese día cada año se conmemora el Día Mundial del Medio Ambiente.

En tanto que el 28 de marzo de 2017 fue declarado como Área Natural Protegida con categoría de Parque Urbano.

Las Áreas Naturales Protegidas en su modalidad de Parques Urbanos constituyen un instrumento fundamental para la conservación de los ecosistemas inmersos en las áreas urbanas”.

Además, representa la posibilidad de lograr un aprovechamiento de los recursos naturales de manera sustentable, se comunicó.

Y es a través de los Programas de Manejo donde se realizan acciones para la conservación, restauración, aprovechamiento y protección de las Áreas Naturales Protegidas, se puntualizó.

Con estos se establecen las bases biológicas, ecológicas, sociales, políticas y culturales necesarias que permitirán tomar medidas para su buen manejo, lo cual permite preservar las áreas verdes, se añadió.

Asimismo, asegurar el equilibrio, la continuidad de los servicios ecosistémicos, facilitar la investigación científica, el desarrollo de actividades recreativas, deportivas, culturales y de educación ambiental, en beneficio de la población, se destacó.

En el Parque Ambiental Bicentenario de Metepec, que es un Área Natural Protegida (ANP), coexisten varias especies, desde aves hasta réptiles, en donde encuentran refugio, señala la Secretaría de Medio Ambiente del Estado de México..

No obstante, dicho espacio se encuentra delimitado en cada una de sus zonas como las boscosas, de cultivo y las recreativas, las últimas están abiertas al público en general.

Recordar que en días pasados una persona en redes sociales publicó la presencia de una víbora de cascabel al interior de dicho parque, de la cual tomó evidencia.

En ese sentido, la dependencia solicita a usuarios que acuden a dicho lugar a dar aviso en caso de nuevos avistamientos al personal de la Coordinación General de Conservación Ecológica que se encuentra al interior del parque.

El Parque Ambiental Bicentenario se ha convertido en un lugar importante para la recreación y el deporte, pero también con un alto potencial para la conservación de la flora y fauna presente en la zona, la cual, a través del tiempo, se ha transformado de espacio rural a una zona urbana, se explicó.

En el caso de la fauna del Parque, indica, existe presencia de un representativo grupo de aves y de otras especies.

Al interior de esta Área Natural Protegida existe una importante superficie con plantaciones de pinos principalmente, formando bosques artificiales, además de varios campos de cultivo (en la zona no abierta al público) y que son colindantes a las áreas recreativas, lo que permite tener presencia de otras especies silvestres, ya que además de las aves, coexisten reptiles, anfibios y mamíferos”.

Hace unos días, mencionó, un usuario avistó la presencia de una víbora de cascabel al interior del Parque en un espacio colindante a la zona boscosa.

Como ya se ha mencionado, esta especie de reptil coexiste y es parte de la biodiversidad presente al interior del ANP y se encuentra al interior, principalmente de las zonas boscosas y en los terrenos de cultivo, en donde encuentra refugio”.

En ese orden, dicha Secretaría, a fin de salvaguardar la integridad y la seguridad de los visitantes a los espacios recreativos y deportivos, los mantienen libres de vegetación, a través de podas frecuentes, lo cual evita la presencia de estos reptiles, destacó.

En ese sentido, solicita a los usuarios de ese espacio público que, en caso de detectar nuevos avistamientos, informen al personal de la Coordinación General de Conservación Ecológica de la Secretaría del Medio Ambiente, quienes tienen oficina al interior del Parque Ambiental Bicentenario.

De igual manera, sugirió que lo pueden hacer al número telefónico 722 179 4165, para tomar las acciones correspondientes.

La dependencia comenta que una de las mejores estrategias para salvaguardar los recursos naturales es la creación de las Áreas Naturales Protegidas (ANP), las cuales promueven la conservación de los recursos naturales y la biodiversidad.

Esos sitios también atienden el desarrollo del sector social y turístico, tal es el caso del Parque Ambiental Bicentenario.

Historia

Dicho parque fue inaugurado el 5 de junio de 2009, ese día cada año se conmemora el Día Mundial del Medio Ambiente.

En tanto que el 28 de marzo de 2017 fue declarado como Área Natural Protegida con categoría de Parque Urbano.

Las Áreas Naturales Protegidas en su modalidad de Parques Urbanos constituyen un instrumento fundamental para la conservación de los ecosistemas inmersos en las áreas urbanas”.

Además, representa la posibilidad de lograr un aprovechamiento de los recursos naturales de manera sustentable, se comunicó.

Y es a través de los Programas de Manejo donde se realizan acciones para la conservación, restauración, aprovechamiento y protección de las Áreas Naturales Protegidas, se puntualizó.

Con estos se establecen las bases biológicas, ecológicas, sociales, políticas y culturales necesarias que permitirán tomar medidas para su buen manejo, lo cual permite preservar las áreas verdes, se añadió.

Asimismo, asegurar el equilibrio, la continuidad de los servicios ecosistémicos, facilitar la investigación científica, el desarrollo de actividades recreativas, deportivas, culturales y de educación ambiental, en beneficio de la población, se destacó.

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