Extorsiones de hasta 20 mil pesos por parte de una empresa de grúas y corralones que opera en el valle de México, se cometen diariamente en contra del transporte de carga.
Por ende, durante una conferencia de prensa, Carlos Cervantes, representante de la Comisión de Transporte de la Asociación de Empresarios y Ciudadanos del Estado de México (Asecem), pidió la intervención de las autoridades de Movilidad y concretamente de la gobernadora, Delfina Gómez Álvarez, para acabar con el "cáncer de las asociaciones corruptas" y respetar el nuevo tabulador de cobros.
“Hacemos un llamado nuevamente a la gobernadora y al titular de la Secretaría de Movilidad, Daniel Sibaja González, para que nos ayuden a regularizar las unidades, porque queremos tener la certeza legal de nuestros patrimonios para poder seguir ofreciendo un buen servicio a los ciudadanos, y para ello ya se anunció el Plan Colibrí”, externó.
Ante la presencia del presidente de la Asecem en la entidad, Raúl Chaparro Romero, denunció que existe una asociación que dice representar al gremio de grúas y corralones, la cual tiene prácticamente secuestrado este sector, pero por respeto a quienes han interpuesto sus denuncias prefirió no mencionar el nombre.
“Todos los empresarios y ciudadanos hemos sufrido los cobros excesivos que imponen las grúas y los corralones; por ejemplo, cuando una unidad la remolcan en Naucalpan y la llevan a Zumpango, y cuando se llega por la unidad solicitan un monto de entre 15 o 20 mil pesos por sacar tu coche que estacionaste en un mal lugar”, apuntó.
Por lo anterior, aseguró que el sector transporte ha visto con “buenos ojos”, el nuevo tabulador de tarifas por parte de la Secretaría de Movilidad, en el cual se muestran montos justos, tanto para los depósitos, como para los arrastres de las unidades.
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“Pedimos que se haga cumplir el tabulador que anunciaron y que estas acciones que tienen controlado el gremio de grúas y corralones se acaben. Varios empresarios de este sector nos han buscado para ver qué pueden hacer, porque dicha empresa los obliga a que los represente y les pide cuotas”, señaló.
Lamentó que existan asociaciones que pueden tomar el control de los gremios, cuando el estado debería ejercer su autoridad, apegado a derecho y a la normatividad.
“En todo el país enfrentamos este problema, pero en el caso de la entidad no se podría proporcionar el nombre de las grúas corruptas por respeto a los empresarios que se han acercado con nosotros”, enfatizó.
Mientras que Raúl Chaparro también se refirió al “paso de la muerte”, como se le conoce a la salida de Cuautitlán Izcalli para la avenida López Portillo, en donde los empresarios son detenidos por la policía municipal de Tultitlán y los extorsionan.
“Lo que buscamos no es hablar mal de nadie, sino decir las cosas como son, porque requerimos de seguridad para invertir. Mientras no existan condiciones para la instalación de empresas, no tendremos la posibilidad de generar los empleos que la ciudadanía está demandando”, manifestó.
