El comienzo del año no ha sido bueno, en materia económica se inició con el pie izquierdo, las expectativas de creación de empleo en el primer trimestre no se están cumpliendo, adicionalmente, los sectores productivos siguen con reportes a la baja y en muchos casos con una alerta de acción inmediata para recuperarlos o las unidades económicas desaparecerán.
De acuerdo con la Encuesta Mensual de Servicios del INEGI, en enero de este año se reportó un decrecimiento de -6% de los Ingresos Totales por Suministro de Bienes y Servicios respecto a diciembre de 2020, pero una caída de -14.6% si consideramos lo obtenido en enero del año inmediato anterior. De igual forma, la encuesta muestra una disminución del personal ocupado de -10.3% respecto a enero de 2020, una contracción de -3.3% respecto a diciembre 2020 en lo que refiere a Gastos Totales por Consumo de Bienes y Servicios, mientras que la caída respecto a enero 2020 es de -12.9%, mismo caso para las Remuneraciones Totales que para este último periodo referido disminuyeron en 9.1%.
Si desglosamos la información, podemos encontrar que los sectores más afectados son los servicios de esparcimiento, culturales, deportivos y otros servicios recreativos, los cuales presentan una variación de -50.7% en enero 2021 respecto al mismo mes del año inmediato interior, con un decrecimiento de -15.4% respecto a su personal ocupado para el mismo periodo. En el mismo sentido los servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas muestran una disminución de -37% en enero de 2021 respecto al primer mes de 2020, con una disminución en su personal ocupado de 19.5%, en ambos sectores antes ejemplificados, también presentan contracción respecto a diciembre 2020.
Otro sector que debemos analizar con especial atención es el de servicios educativos, que presenta una caída de -15.4% de enero 2020 a enero 2021, y de -5% de diciembre 2020 a enero 2021, de igual forma presentó una baja de -8% en su personal ocupado en enero 2020 respecto al mismo mes del año anterior.
Estas cifras, que solo son ejemplos de lo que vive la realidad económica de nuestro país y estado son una muestra clara de que la recuperación no está en camino, que más allá de buena voluntad y retórica requiere de acciones decididas, porque las fuentes de empleo dependen de la salud de las empresas y si estas no presentan condiciones para operar, los empleos y desarrollo económico serán en decremento, es decir, tenderán a desaparecer aún más empresas.
Ya no podemos hablar de sectores esenciales de la economía, porque esencial es el trabajo de cada una de las personas que llevan el sustento a sus hogares, es momento de iniciar acciones contundentes en favor de la población así como la conservación y ampliación de fuentes de empleo resulta medular si es que queremos que 2021 sea el llamado año de la recuperación, de lo contrario estará destinado a ser réplica de 2020, con mayores adversidades.
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