/ martes 5 de abril de 2022

Somos opción

El verdadero reto de la oposición en política no es la descalificación, sino ser opción y solución, como ayer acreditó la coalición Va por México, en el caso de la reforma eléctrica propuesta por el gobierno federal, que durante los últimos meses ha sido motivo de múltiples debates y suspicacias.

Gracias a la exigencia de la oposición en la Cámara de Diputados, la iniciativa presidencial fue turnada para opinión de la Comisión de Medio Ambiente –lo que no estaba en la ruta oficialista-- y fue analizada en múltiples foros donde participaron especialistas de todas las corrientes y sectores.

Lamentablemente en días recientes y con el sello de la casa, Morena y sus aliados en San Lázaro buscan aplicar la mayoría simple que se requiere y tienen en comisiones, para dictaminar a modo y llevar al pleno sin consenso alguno, la iniciativa del Ejecutivo Federal.

Lo que no esperaba la mayoría oficialista, era que el bloque opositor de la Alianza Va por México, integrado por el PRI, el PAN y el PRD, dimos a conocer el día de ayer una contrapropuesta para preservar el impulso a las energías limpias, el bajo costo de la energía y fortalecer la rectoría del Estado en el sector, sin perder competitividad.

En lo que fue un acto de congruencia, responsabilidad y visión de futuro, la propuesta de Va por México establece en la Constitución el acceso a la energía eléctrica como un Derecho Humano al que el pueblo mexicano debe acceder de forma suficiente, continua, limpia, segura, sustentable y accesible, señalando además la obligación gubernamental para queesto ocurra a los costos más bajos y estables posibles.

Prevé asimismo establecer mecanismos que permitan a los ciudadanos generar su propia energía o comprarla a los precios más bajos y estables posibles; garantiza tarifas más bajas a jefas de familia y a grupos vulnerables mediante la aplicación de subsidios focalizados o, donde sea posible, a través de la instalación de sistemas de generación de energía eléctrica en pequeña escala ya sea en los hogares o en forma comunitaria, en modalidad de Generación Distribuida.

Incluye mecanismos de subastas de cobertura eléctrica de mediano y largo plazo como medida específica de protección al usuario o consumidor, obligatoria para el suministro básico, o, en su caso, el Suministrador del Ciudadano podrá firmar contratos bilaterales con plantas ya existentes siempre y cuando su precio sea inferior al promedio del último año del PML.

La iniciativa aliancista obligaría al Estado a conducir la transición energética con la participación del sector público, privado y social y con la lucha al cambio climático y el cumplimiento de acuerdos internacionales como objetivos fundamentales.

Al corregir errores y excesos del pasado, se propone acabar con la simulación, abriendo la oportunidad para que negocios y empresas más pequeños, accedan al mercado eléctrico y sus beneficios, como costos más bajos de energía o energía limpia.

Asimismo, fortalece la Regulación del Mercado, otorgando Autonomía Constitucional a la Comisión Reguladora de Energía y mantiene, reafirma y fortalece la rectoría del Estado en el sector eléctrico.

La alternativa que fue presentada por los dirigentes nacionales del PRI, el PAN y el PRD, brinda autonomía presupuestaria y de gestión a CFE; fomenta la penetración del Uso de Energías Renovables; perfecciona el otorgamiento de permisos para dar seguridad jurídica a los proyectos y subraya que el litio será propiedad del Estado, pero su aprovechamiento seguirá las reglas del Petróleo, por lo que habría rondas para exploración y extracción de los minerales, que garanticen en todo momento al Estado la propiedad, así como ganancias por dicha actividad.

Morena y su mayoría oficialista eligieron la próxima semana para discutir su proyecto en comisiones, pensando tal vez que el periodo vacacional sería favorable para garantizar la votación requerida, toda vez que se trata de una reforma constitucional. Ahora, además de los números, están expuestos a las comparaciones entre una visión como la suya, que se sostiene con alfileres, o pueden elegir una propuesta sólida y responsable como la de Va por México, que piensa en las proximas generaciones y no en las siguientes elecciones.


*Diputada federal reelecta por el Distrito 27 del Estado de México.

@AnaLiliaHerrera.

El verdadero reto de la oposición en política no es la descalificación, sino ser opción y solución, como ayer acreditó la coalición Va por México, en el caso de la reforma eléctrica propuesta por el gobierno federal, que durante los últimos meses ha sido motivo de múltiples debates y suspicacias.

Gracias a la exigencia de la oposición en la Cámara de Diputados, la iniciativa presidencial fue turnada para opinión de la Comisión de Medio Ambiente –lo que no estaba en la ruta oficialista-- y fue analizada en múltiples foros donde participaron especialistas de todas las corrientes y sectores.

Lamentablemente en días recientes y con el sello de la casa, Morena y sus aliados en San Lázaro buscan aplicar la mayoría simple que se requiere y tienen en comisiones, para dictaminar a modo y llevar al pleno sin consenso alguno, la iniciativa del Ejecutivo Federal.

Lo que no esperaba la mayoría oficialista, era que el bloque opositor de la Alianza Va por México, integrado por el PRI, el PAN y el PRD, dimos a conocer el día de ayer una contrapropuesta para preservar el impulso a las energías limpias, el bajo costo de la energía y fortalecer la rectoría del Estado en el sector, sin perder competitividad.

En lo que fue un acto de congruencia, responsabilidad y visión de futuro, la propuesta de Va por México establece en la Constitución el acceso a la energía eléctrica como un Derecho Humano al que el pueblo mexicano debe acceder de forma suficiente, continua, limpia, segura, sustentable y accesible, señalando además la obligación gubernamental para queesto ocurra a los costos más bajos y estables posibles.

Prevé asimismo establecer mecanismos que permitan a los ciudadanos generar su propia energía o comprarla a los precios más bajos y estables posibles; garantiza tarifas más bajas a jefas de familia y a grupos vulnerables mediante la aplicación de subsidios focalizados o, donde sea posible, a través de la instalación de sistemas de generación de energía eléctrica en pequeña escala ya sea en los hogares o en forma comunitaria, en modalidad de Generación Distribuida.

Incluye mecanismos de subastas de cobertura eléctrica de mediano y largo plazo como medida específica de protección al usuario o consumidor, obligatoria para el suministro básico, o, en su caso, el Suministrador del Ciudadano podrá firmar contratos bilaterales con plantas ya existentes siempre y cuando su precio sea inferior al promedio del último año del PML.

La iniciativa aliancista obligaría al Estado a conducir la transición energética con la participación del sector público, privado y social y con la lucha al cambio climático y el cumplimiento de acuerdos internacionales como objetivos fundamentales.

Al corregir errores y excesos del pasado, se propone acabar con la simulación, abriendo la oportunidad para que negocios y empresas más pequeños, accedan al mercado eléctrico y sus beneficios, como costos más bajos de energía o energía limpia.

Asimismo, fortalece la Regulación del Mercado, otorgando Autonomía Constitucional a la Comisión Reguladora de Energía y mantiene, reafirma y fortalece la rectoría del Estado en el sector eléctrico.

La alternativa que fue presentada por los dirigentes nacionales del PRI, el PAN y el PRD, brinda autonomía presupuestaria y de gestión a CFE; fomenta la penetración del Uso de Energías Renovables; perfecciona el otorgamiento de permisos para dar seguridad jurídica a los proyectos y subraya que el litio será propiedad del Estado, pero su aprovechamiento seguirá las reglas del Petróleo, por lo que habría rondas para exploración y extracción de los minerales, que garanticen en todo momento al Estado la propiedad, así como ganancias por dicha actividad.

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