/ miércoles 19 de junio de 2019

Vida Pública

El desafío de la inseguridad

“Como cada lunes, en el Grupo deCoordinación Territorial para la Construcción de la Paz del#Edoméx, analizamos y damos seguimiento a las acciones en materia de seguridad en la entidad”, informó el lunes, vía Twitter, el gobernador del Estado de México. Las reacciones no se hicieron esperar en la misma red social, tan afecta a la polémica: “¿Qué analizan? ¿A qué le dan seguimiento? El estado es uno de los más violentos del país, no se ha visto acción estatal que realmente funcione, salgan a las calles, desde sus oficinas se ven las cosas diferentes a como las sentimos los que padecemos diario este estado!!!”, respondió @MOY9227, David Ortiz Pérez. Tratándose dela inseguridad, es muy importante reconocer que es abismal la diferencia en la percepción del fenómeno desde la perspectiva de la sociedad, respecto a la del gobernante.

Según han informado las autoridades, en esas reuniones analizan, centralmente: el número, tipo y ubicación de delitos ocurridos durante la semana anterior, a partir de las denuncias recibidas por la Fiscalía General de la República y la Fiscalía General de Justicia de la entidad; “el parte”, el informe de los últimos acontecimientos y operativos que conjuntamente y por separado realizaron las policías municipales, la estatal, las de investigación que dependen de las fiscalías y los efectivos del Ejército, la Marina y la Policía Federal destacados en el Estado, que están reagrupándose en lo que será la GuardiaNacional; y seguramente se agregan reportes de diferentes dependencias que informan sobre tareas complementarias.

De ser así, en la información que se usa en esas reuniones hay un déficit de origen, pues los mexicanos, y subrayadamente los mexiquenses, ya no denunciamos los delitos cuando los padecemos. Quien llega a presentarse ante el MinisterioPúblico a notificar que fue víctima de un delito, no lo hace porque espere justicia y confíe que la investigación concluirá identificando al responsable y castigándolo. No. Quien denuncia lo hace obligado por un trámite, porque necesita la denuncia plasmada en el papel porque es un requisito en su empleo o ante su aseguradora. Nadie lo hace con la esperanza de que se hará justicia.De acuerdo con cifras oficiales, la abrumadora mayoría calla y resuelve el problema de otro modo ¡96.1 de cada 100 delitos no se denuncian! Según el INEGI -instancia a la que nadie ha desmentido-,las reuniones semanales de coordinación están enfocadas en menos de3.9% de la mayor preocupación de los ciudadanos. En declaraciones atribuidas la Secretaría de Seguridad del gobierno estatal, una treintena de municipios registran 70% de esas denuncias, razón por la cual en esas demarcaciones se enfoca la atención institucional.Esto significaría que se están concentrando los esfuerzos y recursos en una parte del fenómeno y apenas en ciertas regiones dela geografía. Suponiendo -y deseando- que su trabajo tenga éxito, es decir, que se resolviera esa porción del problema criminal, no cambiaría la percepción social de ineficacia, porque la mayor cantidad de delitos y los que más molestan a los mexiquenses son más, son otros y ocurren en todas partes.

Vale la pena insistir: del tamaño del desafío es el de la oportunidad que sociedad y gobierno tenemos para resolverlo.

De este modo luce clara, obvia e indispensable la necesidad de los responsables de nuestra seguridad, de conocer el 96.1% de delitos que ocurren, de los que ahora no se enteran. Trabajando con estrategia es posible contar con esa información, de manera prácticamente inmediata y con cobertura general del territorio, a partir de estudios municipales de victimización. Con ellos, la acción gubernamental dará respuesta directa a la exigencia social de seguridad, destinará a los elementos, incluyendo los que aporta el gobierno federal a donde efectivamente se necesitan, atenderá el cúmulo de situaciones que más agravian a la gente -y que no necesariamente son las más complejas y peligrosas- y los avances semanales que anuncie el gobierno se compadecerán con lo que la sociedad observa en calles y colonias. Dar el primer paso que se necesita para alinear gobierno, seguridad y sociedad, exige poco más que voluntad.

@HuicocheaAlanis

El desafío de la inseguridad

“Como cada lunes, en el Grupo deCoordinación Territorial para la Construcción de la Paz del#Edoméx, analizamos y damos seguimiento a las acciones en materia de seguridad en la entidad”, informó el lunes, vía Twitter, el gobernador del Estado de México. Las reacciones no se hicieron esperar en la misma red social, tan afecta a la polémica: “¿Qué analizan? ¿A qué le dan seguimiento? El estado es uno de los más violentos del país, no se ha visto acción estatal que realmente funcione, salgan a las calles, desde sus oficinas se ven las cosas diferentes a como las sentimos los que padecemos diario este estado!!!”, respondió @MOY9227, David Ortiz Pérez. Tratándose dela inseguridad, es muy importante reconocer que es abismal la diferencia en la percepción del fenómeno desde la perspectiva de la sociedad, respecto a la del gobernante.

Según han informado las autoridades, en esas reuniones analizan, centralmente: el número, tipo y ubicación de delitos ocurridos durante la semana anterior, a partir de las denuncias recibidas por la Fiscalía General de la República y la Fiscalía General de Justicia de la entidad; “el parte”, el informe de los últimos acontecimientos y operativos que conjuntamente y por separado realizaron las policías municipales, la estatal, las de investigación que dependen de las fiscalías y los efectivos del Ejército, la Marina y la Policía Federal destacados en el Estado, que están reagrupándose en lo que será la GuardiaNacional; y seguramente se agregan reportes de diferentes dependencias que informan sobre tareas complementarias.

De ser así, en la información que se usa en esas reuniones hay un déficit de origen, pues los mexicanos, y subrayadamente los mexiquenses, ya no denunciamos los delitos cuando los padecemos. Quien llega a presentarse ante el MinisterioPúblico a notificar que fue víctima de un delito, no lo hace porque espere justicia y confíe que la investigación concluirá identificando al responsable y castigándolo. No. Quien denuncia lo hace obligado por un trámite, porque necesita la denuncia plasmada en el papel porque es un requisito en su empleo o ante su aseguradora. Nadie lo hace con la esperanza de que se hará justicia.De acuerdo con cifras oficiales, la abrumadora mayoría calla y resuelve el problema de otro modo ¡96.1 de cada 100 delitos no se denuncian! Según el INEGI -instancia a la que nadie ha desmentido-,las reuniones semanales de coordinación están enfocadas en menos de3.9% de la mayor preocupación de los ciudadanos. En declaraciones atribuidas la Secretaría de Seguridad del gobierno estatal, una treintena de municipios registran 70% de esas denuncias, razón por la cual en esas demarcaciones se enfoca la atención institucional.Esto significaría que se están concentrando los esfuerzos y recursos en una parte del fenómeno y apenas en ciertas regiones dela geografía. Suponiendo -y deseando- que su trabajo tenga éxito, es decir, que se resolviera esa porción del problema criminal, no cambiaría la percepción social de ineficacia, porque la mayor cantidad de delitos y los que más molestan a los mexiquenses son más, son otros y ocurren en todas partes.

Vale la pena insistir: del tamaño del desafío es el de la oportunidad que sociedad y gobierno tenemos para resolverlo.

De este modo luce clara, obvia e indispensable la necesidad de los responsables de nuestra seguridad, de conocer el 96.1% de delitos que ocurren, de los que ahora no se enteran. Trabajando con estrategia es posible contar con esa información, de manera prácticamente inmediata y con cobertura general del territorio, a partir de estudios municipales de victimización. Con ellos, la acción gubernamental dará respuesta directa a la exigencia social de seguridad, destinará a los elementos, incluyendo los que aporta el gobierno federal a donde efectivamente se necesitan, atenderá el cúmulo de situaciones que más agravian a la gente -y que no necesariamente son las más complejas y peligrosas- y los avances semanales que anuncie el gobierno se compadecerán con lo que la sociedad observa en calles y colonias. Dar el primer paso que se necesita para alinear gobierno, seguridad y sociedad, exige poco más que voluntad.

@HuicocheaAlanis