Huawei
En fechas recientes la marca de tecnología Huawei –de origen Chino- se ha enfrentado a un reto sin precedentes en el rubro y todo gracias a la guerra comercial que existe entre Estados Unidos y China desde el año pasado. Y es que Donald Trump incluyó a la marca en su lista negra por considerarla como una amenaza a la seguridad nacional de su país.
Antes que otra cosa es importante entender de dónde viene este conflicto comercial entre ambas naciones. La problemática inicia cuando en julio del 2018 Washington aprobó una incremento en los aranceles de productos chinos del 10 al 25% y evidentemente China no se quedó de brazos cruzados y respondió con aranceles del 25% a productos estadounidenses. La realidad es que esta estrategia comercial busca que, en teoría, los productos fabricados en Estado Unidos sean más baratos que aquellos que vienen de otros países ya que incentivan a los consumidores a comprar producto nacional. Por su parte el presidente norteamericano, Donald Trump insiste en que esto puede parecer malo de inicio para la economía de los estadounidenses pero que a largo plazo la economía china también saldrá perjudicada.
Ahora se entiende porque la marca tecnológica Huawei se ha visto perjudicada pues esta guerra geocomercial está orillando a empresas como Google, Intel, Qualcomm, Xilinx y Broadcom ha darle la espalda. Sin embargo, la que más suena es Google pues la suspensión de sus negocios referentes a la transferencia de productos de hardware y software podría hacer que los smartphones de la marca sean inservibles para muchos usuarios en el mundo.
Si bien, de momento las estrategias de imagen y relaciones públicas tomadas por parte de la empresa para mantener a sus usuarios en calma han sido buenas pues las declaraciones del CEO (Chief Executive Offiver) de la empresa, Ren Zhengfei señalan entre otras cosas que defendería a Apple en caso de que China tomara represalias contra la marca, además de decir públicamente que continuarían atendiendo a sus clientes pues están progresando con las licitaciones a nivel mundial, las pérdidas en la bolsa y la baja en las ventas de sus productos tecnológicos son evidentes.
Lo interesante aquí es entender que hoy en día la función de un CEO va mucho más allá de dirigir la empresa, este también es el encargado de acercarse con su público meta, es decir mantener relaciones públicas sanas a través de los medios de comunicación y las redes sociales para beneficiar a la marca. Así el CEO de Huawei ha buscado proyectar una imagen conciliadora, lejana a la confrontación y hablando en positivo claro está sin dejar pasar advertencias que sin duda afectarían en el corto y largo plazo al mercado laboral estadounidense específicamente considerando la perdida de empleos de más de 1,200 empresas encargadas de la seguridad cibernética de la marca en EEUU.
@Mar_Naa
