Una canción de Lara
Uno
En una de sus más inspiradas y populares canciones, el músico poeta Agustín Lara escribió:
“Vende caro tu amor, aventurera/ dale el precio del dolor a tu pasado/ y aquél que de tu boca la miel quiera/ que pague con brillantes tu pecado”.
Dos
Como la mayoría de las canciones de Lara, tan escuchadas en su época, “Aventurera” ya pasó de moda, pero su profundo mensaje lo tienen muy claro, por lo que ve, el Partido Verde Ecologista y el actual gobernador del estado de Chiapas, Manuel Velasco.
En la primera sesión del Senado de la República, salió a votación la solicitud de licencia del senador Velasco −quien acababa de tomar posesión del cargo− para regresar a Chiapas, terminar su período de gobernador y volver de nueva cuenta al senado, esa soberanía colegiada que un día viera morir en trágicas circunstancias, hace muchos años, al senador chiapaneco Belisario Domínguez.
Previamente, Velasco había modificado la constitución de su estado para poder asistir con licencia a la toma de posesión y volver después como si nada hubiera pasado.
Sin embargo, de primera intención, los senadores vieron con malos ojos la maniobra y negaron la licencia solicitada. Velasco no se resignó a perder y movió rápidamente sus hilos políticos, de modo que para la tarde del mismo día, el jefe de la fracción morenista, Ricardo Monreal, trajo nuevamente a cuento la solicitud de licencia, que fue inmediatamente aprobada por los mismos senadores que la habían rechazado.
En la misma jornada, el Partido Verde, que apoya a Velasco, hizo el anuncio de que cinco de sus diputados se sumaban a Morena para darle mayoría absoluta en la Cámara de Diputados y facilitarle los cambios constitucionales que requiere para modificar las reformas estructurales del actual gobierno. Simultáneamente se dio el extraño caso de la propuesta de acuerdo rechazada y aprobada el mismo día.
Tres
¿Qué sucedió tras bambalinas? Durante la sesión del Senado, Monreal había anunciado –con el beneplácito de muchos− medidas de ahorro que representan muchos millones de pesos al año. Vivía su momento de gloria y el de su partido. ¿Por qué tropezó después haciendo que los senadores dijeran primero “no” y después “sí”?
Nadie dejó de relacionar la titubeante decisión con el ya esperado traspaso de cinco legisladores verdes a la nueva mayoría legislativa, ya que, días atrás, el partido del tucán había roto una fructífera relación de más de seis años con el PRI, en la que fueron juntos a las casillas electorales y obtuvieron numerosos triunfos.
Pero, todo eso es hoy simple recuerdo.
