/ miércoles 25 de septiembre de 2019

Repique inocente / Ecos del informe


El gobernador Alfredo del Mazo Maza rindió su segundo informe de gobierno, como seguramente ya lo saben los lectores de El Sol de Toluca.

No me ocuparé del contenido, porque los reporteros, fotógrafos y editores de este egregio diario ya han dado cuenta en estas mismas páginas —impresas y digitales— de lo que el jefe del Ejecutivo del Estado de México ha dado a conocer.

Quienes sigan adelante —de mis cuatro lectores doy por descontado que lo harán— quedan advertidos de que leerán mi opinión, mía de mí.

Y que, por lo tanto, están en todo su derecho de acordar, coincidir, discrepar, disentir o abominar de lo que sigue. Pero es lo que se me pega mi regalada gana expresar.

Primero he decir que fue un acto pulcro, por tanto, impecable. Donde se dejó ver ese profesionalismo político del que tanto se habla, cuando se habla de la clase política del Estado de México, sin importar partidos o ideologías. Ahí estuvieron, hombro con hombro —y es literal, las sillas estaban apiñadas— los diputados y presidentes municipales de Morena, PRI, PAN, PT, Verde, PRD y Encuentro Social. Cuando se trata del devenir del estado de México es visible que las ideologías se hacen a un lado.

Un guiño del gobernador Del Mazo que no puede pasar desapercibido fue el color de la corbata. Porque ya sabes que los políticos, especialmente los mexiquenses, son dados a comunicar mediante sus gestos e imagen. Ignoro si fue una coincidencia o una decisión deliberada, pero el color de la corbata era vino, guinda o un tono similar. Nada del rojo encendido característico del priismo de prosapia y linaje.

Coincidencia o no, tampoco puede pasar inadvertido el discurso conciliador, moderado y concertador del gobernador mexiquense al dirigirse al gobierno federal, ya sea al Presidente de la República o hacia la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, presente en el acto. Para nadie es un secreto el escenario político actual, en el que predomina el movimiento político del presidente López Obrador. Es el que parte el queso. El que tiene la sartén por el mango. La inteligencia política del gobernador Del Mazo lo advierte y lo expresa. En este escenario, la confrontación lo único que podría ocasionar sería una especie de inclemente glaciación hacia el gobierno mexiquense, con las consecuencias que esto puede traer para la población en términos de obra y acción de gobierno.

También ha sido comedido y afectuoso con sus opositores de Morena en la Legislatura local, a los que no dudó en elogiar por comprometerse con la estabilidad institucional.

También, que a pesar de todas las dudas que se habían expresado en los corrillos políticos, sí hubo acciones y avances que informar. Aunque también pendientes, especialmente en materia de seguridad. No obstante, hay que destacar el avance económico del estado, que es base sustantiva del crecimiento y desarrollo: el alcance de la inversión, la calificación crediticia y hasta la disminución en las cifras asociadas a la pobreza.

No hablar de la convocatoria: la clase política afín al priismo estuvo en palacio de gobierno de Toluca. Exgobernadores y gobernadores, diputados y senadores, dirigentes de partidos. El informe del gobernador del Estado de México sigue siendo uno de los epicentros de la política nacional. Así nomás.

Mail: felgonre@gmail.com @FelipeGlz


El gobernador Alfredo del Mazo Maza rindió su segundo informe de gobierno, como seguramente ya lo saben los lectores de El Sol de Toluca.

No me ocuparé del contenido, porque los reporteros, fotógrafos y editores de este egregio diario ya han dado cuenta en estas mismas páginas —impresas y digitales— de lo que el jefe del Ejecutivo del Estado de México ha dado a conocer.

Quienes sigan adelante —de mis cuatro lectores doy por descontado que lo harán— quedan advertidos de que leerán mi opinión, mía de mí.

Y que, por lo tanto, están en todo su derecho de acordar, coincidir, discrepar, disentir o abominar de lo que sigue. Pero es lo que se me pega mi regalada gana expresar.

Primero he decir que fue un acto pulcro, por tanto, impecable. Donde se dejó ver ese profesionalismo político del que tanto se habla, cuando se habla de la clase política del Estado de México, sin importar partidos o ideologías. Ahí estuvieron, hombro con hombro —y es literal, las sillas estaban apiñadas— los diputados y presidentes municipales de Morena, PRI, PAN, PT, Verde, PRD y Encuentro Social. Cuando se trata del devenir del estado de México es visible que las ideologías se hacen a un lado.

Un guiño del gobernador Del Mazo que no puede pasar desapercibido fue el color de la corbata. Porque ya sabes que los políticos, especialmente los mexiquenses, son dados a comunicar mediante sus gestos e imagen. Ignoro si fue una coincidencia o una decisión deliberada, pero el color de la corbata era vino, guinda o un tono similar. Nada del rojo encendido característico del priismo de prosapia y linaje.

Coincidencia o no, tampoco puede pasar inadvertido el discurso conciliador, moderado y concertador del gobernador mexiquense al dirigirse al gobierno federal, ya sea al Presidente de la República o hacia la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, presente en el acto. Para nadie es un secreto el escenario político actual, en el que predomina el movimiento político del presidente López Obrador. Es el que parte el queso. El que tiene la sartén por el mango. La inteligencia política del gobernador Del Mazo lo advierte y lo expresa. En este escenario, la confrontación lo único que podría ocasionar sería una especie de inclemente glaciación hacia el gobierno mexiquense, con las consecuencias que esto puede traer para la población en términos de obra y acción de gobierno.

También ha sido comedido y afectuoso con sus opositores de Morena en la Legislatura local, a los que no dudó en elogiar por comprometerse con la estabilidad institucional.

También, que a pesar de todas las dudas que se habían expresado en los corrillos políticos, sí hubo acciones y avances que informar. Aunque también pendientes, especialmente en materia de seguridad. No obstante, hay que destacar el avance económico del estado, que es base sustantiva del crecimiento y desarrollo: el alcance de la inversión, la calificación crediticia y hasta la disminución en las cifras asociadas a la pobreza.

No hablar de la convocatoria: la clase política afín al priismo estuvo en palacio de gobierno de Toluca. Exgobernadores y gobernadores, diputados y senadores, dirigentes de partidos. El informe del gobernador del Estado de México sigue siendo uno de los epicentros de la política nacional. Así nomás.

Mail: felgonre@gmail.com @FelipeGlz