/ miércoles 10 de marzo de 2021

Subrayando | Una gran alianza 


Si una alianza es un pacto o unión entre personas para lograr un fin común. Lo que se necesita ahora es una Gran Alianza para avanzar hacia un país más justo e igualitario. Una alianza entre mujeres y hombres, con los mismos derechos humanos, iguales ante la ley, y ante los hechos diarios, con el mismo reconocimiento de capacidades y posibilidades, con la misma fuerza y el mismo poder para mejorar las condiciones de vida en esta época, en este momento histórico, sin distingos de ninguna clase.

Así como se hicieron las mas importantes Alianzas de la humanidad para poder avanzar en épocas de grandes crisis, así ahora, cuando se siente el retroceso en el reconocimiento de los mismos derechos a las mujeres y a los hombres, se requiere la voluntad, primero para reconocer la desigualdad existente, luego la voluntad de todas y todos para participar y comprometerse.

No es menor el reto, no es cuestión de aparentar, ni de ”parchar programas”, ni de tomarlo como algo sin importancia, ni de dejar bien a personas y grupos. No es cuestión de cubrir sexenios, ni de ganar elecciones. No es cuestión de enfrentamientos entre mujeres y hombres, No es cuestión de demostrar valores caducos y débiles como el machismo. No es demostrar quién es más astuto.

No, es más que todo eso, es lograr la unión para mejorar, la verdadera unión, reconociendo el valor de la diversidad que enriquece la alianza. Se acabo el tiempo solo de luchar por conquistar una sola cosa. El voto la mujer ya lo tiene, La ley ya la reconoce, Demostrar su capacidad, en todas las áreas lo ha hecho. Pero todavía es conveniente para las personas retrogradas usar el estereotipo de sumisión y debilidad, para manipularla, agredirla, violentarla y matarla. Y todavía es conveniente para muchas, dejarse manipular por intereses de algún tipo, o por ignorancia de su valor humano.

Ni unos ni otros entran en una Gran Alianza, se necesitan seres íntegros, fuertes de espíritu, para lograr una verdadera transformación cultural. En esa alianza seguro no entrarían los que promueven la división, el halago, los que repiten los problemas y las superficiales soluciones, los que propician la maldad en mecanismos que menosprecien, que aparenten cambios,(ya sabemos que se dice una cosa y se hace otra,) que presumen” medidas de avance”, pero no saben que el poder es para servir .

Todo eso ya se conoce, nada es nuevo. ya basta de simular, ni de solo pedir unas y otros ”burlarse” y conceder”. Ya basta, de impunidad y de corrupción, que ha permitido y propiciado la violencia desde la casa, Y, en todos lados.

Que todo eso y más, que ya se sabe, sea cosa del pasado. Ahora es necesario y urgente: UNA GRAN ALIANZA ENTRE LOS MEXICANOS, entre los Gobernantes, Los Poderes, los Órdenes de Gobierno, los Representantes Populares, Los Partidos Políticos, Las Iglesias, Los Militares, Los Maestros, Los Empresarios, Los Comerciantes Los trabajadores del campo y la ciudad, Los Centros de Estudios Superiores, Los Estudiantes y Académicos, la Sociedad Civil, con sus organizaciones de mujeres y todos los que verdaderamente quieran un país justo e igualitario para ellos, sus hijas y sus hijos, y en donde todos salgan ganando.



Si una alianza es un pacto o unión entre personas para lograr un fin común. Lo que se necesita ahora es una Gran Alianza para avanzar hacia un país más justo e igualitario. Una alianza entre mujeres y hombres, con los mismos derechos humanos, iguales ante la ley, y ante los hechos diarios, con el mismo reconocimiento de capacidades y posibilidades, con la misma fuerza y el mismo poder para mejorar las condiciones de vida en esta época, en este momento histórico, sin distingos de ninguna clase.

Así como se hicieron las mas importantes Alianzas de la humanidad para poder avanzar en épocas de grandes crisis, así ahora, cuando se siente el retroceso en el reconocimiento de los mismos derechos a las mujeres y a los hombres, se requiere la voluntad, primero para reconocer la desigualdad existente, luego la voluntad de todas y todos para participar y comprometerse.

No es menor el reto, no es cuestión de aparentar, ni de ”parchar programas”, ni de tomarlo como algo sin importancia, ni de dejar bien a personas y grupos. No es cuestión de cubrir sexenios, ni de ganar elecciones. No es cuestión de enfrentamientos entre mujeres y hombres, No es cuestión de demostrar valores caducos y débiles como el machismo. No es demostrar quién es más astuto.

No, es más que todo eso, es lograr la unión para mejorar, la verdadera unión, reconociendo el valor de la diversidad que enriquece la alianza. Se acabo el tiempo solo de luchar por conquistar una sola cosa. El voto la mujer ya lo tiene, La ley ya la reconoce, Demostrar su capacidad, en todas las áreas lo ha hecho. Pero todavía es conveniente para las personas retrogradas usar el estereotipo de sumisión y debilidad, para manipularla, agredirla, violentarla y matarla. Y todavía es conveniente para muchas, dejarse manipular por intereses de algún tipo, o por ignorancia de su valor humano.

Ni unos ni otros entran en una Gran Alianza, se necesitan seres íntegros, fuertes de espíritu, para lograr una verdadera transformación cultural. En esa alianza seguro no entrarían los que promueven la división, el halago, los que repiten los problemas y las superficiales soluciones, los que propician la maldad en mecanismos que menosprecien, que aparenten cambios,(ya sabemos que se dice una cosa y se hace otra,) que presumen” medidas de avance”, pero no saben que el poder es para servir .

Todo eso ya se conoce, nada es nuevo. ya basta de simular, ni de solo pedir unas y otros ”burlarse” y conceder”. Ya basta, de impunidad y de corrupción, que ha permitido y propiciado la violencia desde la casa, Y, en todos lados.

Que todo eso y más, que ya se sabe, sea cosa del pasado. Ahora es necesario y urgente: UNA GRAN ALIANZA ENTRE LOS MEXICANOS, entre los Gobernantes, Los Poderes, los Órdenes de Gobierno, los Representantes Populares, Los Partidos Políticos, Las Iglesias, Los Militares, Los Maestros, Los Empresarios, Los Comerciantes Los trabajadores del campo y la ciudad, Los Centros de Estudios Superiores, Los Estudiantes y Académicos, la Sociedad Civil, con sus organizaciones de mujeres y todos los que verdaderamente quieran un país justo e igualitario para ellos, sus hijas y sus hijos, y en donde todos salgan ganando.