/ sábado 21 de diciembre de 2019

Con valor agregado | El desarrollo en sala de espera


Como cada mes, el INEGI dio a conocer los resultados de la Encuesta Nacional de Empresas Constructoras (ENEC), esta ocasión para reflejar los resultados al mes de octubre de 2019.

Nada para sorprender, desafortunadamente se está haciendo costumbre observar resultados a la baja, todos los meses, todos los indicadores. Por su parte, la ENEC refleja que el valor de producción de las empresas constructoras cayó 11.1% respecto al mismo mes del año anterior y también registró a la baja en 1.9% respecto al mes inmediato anterior, es decir, por ningún lado se observan resultados satisfactorios.

En cuanto a horas trabajadas el retroceso fue de 2.2% ante octubre de 2018 y también en caída 0.2% respecto a septiembre de este año. Tal como se ha observado todo este año, la industria de la construcción sigue en caída libre.

Si bien en el Estado de México se ha anunciado en reiterados foros que la construcción del tren México – Toluca sigue en proceso y que se ha reactivado la autopista Toluca – Naucalpan así como la Atlacomulco – Atizapán, y la llegada del nuevo aeropuerto de Santa Lucía, la realidad es que estas obras van muy lentas y no detonan a este sector que se considera termómetro de la economía.

Asimismo, 2019 ha sido un año que tuvo una doble coyuntura política que de origen, merma la producción de obra pública como lo es el primer año del Gobierno Federal y los 125 Gobiernos municipales que pareciera siguen en la curva de aprendizaje, pero el desarrollo no espera.

Continuando con temas de obra pública, esperemos que los Gobiernos no presenten superávit en sus finanzas, porque sería injustificable tener que explicar que tuvieron recursos pero no supieron invertirlos bajo las reglas de operación de cada programa, en tiempo y forma.

Este año también ha traído consigo incertidumbre, y por ello la obra privada que incluye al sector vivienda no ha detonado como se requiere, lo cual impacta en posponer proyectos comerciales, de servicios y hasta recreativos.

Habrá que ver las medidas que los Gobiernos implementan para revertir este efecto, por lo pronto, en el Estado de México se vislumbra un esquema de Asociación Público Privada (APP´s), para dar mantenimiento carretero a 82 vías estatales de libre peaje, que conectan a 45 municipios del sur de la entidad, durante los próximos 12 años, con un monto de inversión superior a los 13 mil millones de pesos. Ojalá se hubiera previsto un mismo esquema para programas de infraestructura productiva como ancla para nuevas inversiones privadas. Sin embargo esperemos que esta sea la primera de una seria de medidas que detonen la industria de la construcción que es una de las que más empleos generan en las zonas de origen de los trabajadores además de incidir en más de 80 ramas de la economía. Al tiempo.

PRESIDENTA DEL CCEM / @LauraGlezEDOMEX


Como cada mes, el INEGI dio a conocer los resultados de la Encuesta Nacional de Empresas Constructoras (ENEC), esta ocasión para reflejar los resultados al mes de octubre de 2019.

Nada para sorprender, desafortunadamente se está haciendo costumbre observar resultados a la baja, todos los meses, todos los indicadores. Por su parte, la ENEC refleja que el valor de producción de las empresas constructoras cayó 11.1% respecto al mismo mes del año anterior y también registró a la baja en 1.9% respecto al mes inmediato anterior, es decir, por ningún lado se observan resultados satisfactorios.

En cuanto a horas trabajadas el retroceso fue de 2.2% ante octubre de 2018 y también en caída 0.2% respecto a septiembre de este año. Tal como se ha observado todo este año, la industria de la construcción sigue en caída libre.

Si bien en el Estado de México se ha anunciado en reiterados foros que la construcción del tren México – Toluca sigue en proceso y que se ha reactivado la autopista Toluca – Naucalpan así como la Atlacomulco – Atizapán, y la llegada del nuevo aeropuerto de Santa Lucía, la realidad es que estas obras van muy lentas y no detonan a este sector que se considera termómetro de la economía.

Asimismo, 2019 ha sido un año que tuvo una doble coyuntura política que de origen, merma la producción de obra pública como lo es el primer año del Gobierno Federal y los 125 Gobiernos municipales que pareciera siguen en la curva de aprendizaje, pero el desarrollo no espera.

Continuando con temas de obra pública, esperemos que los Gobiernos no presenten superávit en sus finanzas, porque sería injustificable tener que explicar que tuvieron recursos pero no supieron invertirlos bajo las reglas de operación de cada programa, en tiempo y forma.

Este año también ha traído consigo incertidumbre, y por ello la obra privada que incluye al sector vivienda no ha detonado como se requiere, lo cual impacta en posponer proyectos comerciales, de servicios y hasta recreativos.

Habrá que ver las medidas que los Gobiernos implementan para revertir este efecto, por lo pronto, en el Estado de México se vislumbra un esquema de Asociación Público Privada (APP´s), para dar mantenimiento carretero a 82 vías estatales de libre peaje, que conectan a 45 municipios del sur de la entidad, durante los próximos 12 años, con un monto de inversión superior a los 13 mil millones de pesos. Ojalá se hubiera previsto un mismo esquema para programas de infraestructura productiva como ancla para nuevas inversiones privadas. Sin embargo esperemos que esta sea la primera de una seria de medidas que detonen la industria de la construcción que es una de las que más empleos generan en las zonas de origen de los trabajadores además de incidir en más de 80 ramas de la economía. Al tiempo.

PRESIDENTA DEL CCEM / @LauraGlezEDOMEX