Aquí mencionamos la irregular entrega de concesiones para explotación de agua en zonas de reserva. Fue hace años, desde el principio del problema. Entonces no había la voluntad de hacer justicia, sólo negocios. Aquí, mencioné el riesgo de cambiar el estatus jurídico al Nevado de Toluca, quienes lo justificaron argumentaron que era para protegerlo. Actualmente, la tala sigue y son muy pocos quienes adquirieron terrenos forestales para protegerlo. Es una historia “sin fin”. Una lucha interminable entre las personas que procuran proteger la vida del planeta y aquellos que con dinero y poder destruyen la vida para enriquecerse a costa del empobrecimiento de las personas y comunidades.
A pesar de ello hay seres humanos preocupados por defender la vida de los seres vivos y mantener el equilibrio ecológico del planeta. Siembran árboles, protegen cuencas de agua, procuran la reducción de bióxido de carbono en la atmósfera, usan pesticidas orgánicos en sus cultivos, procesan la basura y rescatan la cultura de amor al planeta y al hombre.
Sobre el tema, el fin de semana me perdí en las montañas límite entre Michoacán y el Estado de México. Georgina Herrera Tello, delegada de turismo de la zona llamada “País de la Monarca” en tierras michoacanas me invitó a la Feria del Hongo en Senguio y a un concierto de rock en otomí en San Felipe, donde recibí su anfitrionía y la del alcalde de Zitácuaro, Hugo Alberto Hernández.
Llegar fue toda una aventura, pasé por Atlacomulco, me dirigí a El Oro, di vuelta a San José del Rincón, rumbo a Villa Victoria y de allí a Angangueo. No imaginaba el paraíso que cruzaría entre los dos estados. Bosque, montañas, gente agradable, la paz lo inundaba todo. El ritmo de estrés de la vida diaria se quedó atrás. El aire silbaba suavemente por los cristales del auto mientras avanzaba. Al paso vi una chica rubia, ojos azules, camisa de lana a cuadros, mezclilla y botas de trabajo, junto a hombres y mujeres de vestimenta mazahua. Disfrutaban la vida y sus momentos. No le preocupaba lo fashion, su rostro mostraba paz y una sonrisa. Regresé al planeta sabiendo que estaba perdido en la ruta. El bosque dio paso a llanuras y pastos, un letrero que decía Irimbo. Entonces llamó la delegada, ¿dónde andas? Preguntó, pasó por mí, me llevó a Senguio explicándome que estábamos en una zona donde la Mariposa Monarca llega cada año y las personas pueden venir a visitarlas y admirarlas. Así regresé a la realidad. Los bosques quedaron atrás.
Llegando a Senguio -recibí un correo-, Georgina me mostró una exposición de 400 variedades de hongos comestibles, venenosos, alucinógenos, tóxicos, medicinales, descortezadores. La variedad, formas y colores fue alucinante.
El correo mencionaba la próxima COP25 la “Cumbre Mundial de Medio Ambiente” que se realizará en Chile para diciembre. El texto incluía una liga sobre la situación del calentamiento de la Tierra y el avance en las políticas públicas mundiales para combatir el calentamiento y el cambio climático. Lo enviaba Patricia Espinosa, mexicana que lidera en la ONU la lucha en el tema. Entonces medité somos una sociedad de contrastes en la lucha por la supervivencia, destruimos al planeta y cuando comprendemos que nos estamos suicidando, intentamos corregirlo en lugar de aprovechar los recursos y riqueza que tenemos, en armonía, Dios, hombre, naturaleza… vida.
Presidente de Proyecto Jord Lu'um A. C.
Licenciado en Comunicación egresado de la UAEM
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