¿Cuáles el beneficio que puede dar la historia?, se preguntarán algunas personas, ¿qué credibilidad tiene, si al pasar los años algunas delas versiones históricas cambian?, según las circunstancias y los intereses.
Pero y si la memoria histórica guarda fielmente los documentos con las palabras que reflejan ideas, estrategias, aciertos y desaciertos ocurridos, aunque sean de otras épocas pero que han sido vividos por seres humanos con pasiones, sentimientos de amor, de odio, de servicio, de destrucción, de ambición, de omisión, iguales a los que los seres humanos viven actualmente, entonces ese algo en común hay que buscarlo y conocerlo, porque de algo ha de servir.
Y más cuando se trata de aprender de experiencias que han entregado beneficios para las mayorías. Los grandes autores y las obras reconocidas por la literatura universal, como obras maestras, a través de cientos de años precisamente hablan el mismo lenguaje emocional de todo ser humano.
En la historia de los pueblos, grandes ideas, expresadas en foros públicos, recogidas en documentos fieles a la palabra, existen para consulta como lecciones, unas para repetirlas, otras para desecharlas, pero todas al conocerlas enriquecerán la cultura humana de todos los tiempos.
Yen política darle valor a la memoria histórica merece reconocimiento. Hace unos días el presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, senador Martín Batres, en la casona deXicoténcatl, informó que ha sido digitalizada y puesta en línea para la consulta de la ciudadanía la Memoria Documental del Senado.
Documentos que nos permiten traer hasta el siglo XXI, y los que siguen pensamientos, propuestas, exhortos, convocatorias a la lucha, manifestaciones que fueron expresadas con pasión de servicio aMéxico y que han forjado a través de los años a nuestro país.
MemoriaDocumental del Senado, que responde al derecho a la memoria que tenemos los mexicanos y a la verdad, documentos que no son interpretaciones de época o autor, porque son compromisos dichos por los que con vehemencia han sido congruentes en su palabra y en su acción, y que no pueden ni se tienen que olvidar, si se quiere seguir luchando por un México mejor.
